INFECCIONES NECROTIZANTES DE LOS TEJIDOS BLANDOS
Este tipo de infecciones se caracterizan por ser producidas por gérmenes tanto aerobios como anaerobios. Generalmente son complicación en lesiones traumáticas, postquirúrgicas o se desarrollan alrededor de cuerpos extraños. La flora causante de la infección, es flora anaerobia y los Gram negativos.
Al presentarse la infección, se produce una necrosis con edema localizado, lo que produce una disminución de la microcirculación con la consecuente caída del potencial de óxido-reducción, lo que favorece en particular, el desarrollo de las bacterias anaerobias. El cuadro se caracteriza por necrosis de los tejidos, producción de gas y secreciones purulentas.
Debido al elevado índice de morbimortalidad que presenta este tipo de infecciones, está indicada la OHB junto con el desbridamiento quirúrgico precoz y terapia con antibióticos, siendo la morbilidad distinta dependiendo del tipo de infección.
CLASIFICACIÓN
Generalmente se aceptan las siguientes categorías:
- Gangrena bacteriana sinergística o gangrena de Meleney (Estreptococo microaerofílico + S. aureus o Proteus)
- Celulitis sinergística necrotizante
- Celulitis crepitante no clostridiana
- Fascitis necrotizante
- Pioderma estafilocóccica, celulitis e infecciones estafilocóccicas de la herida
- Pioderma estreptocóccica o impétigo, erisipela, celulitis, úlceras y gangrenas,
- infecciones estreptocóccicas de la herida
- Pioderma gangrenosum (por flora polimicrobiana)
- Gangrena gaseosa (clostridiana)
- Mucormicosis cutánea necrotizante
En la práctica clínica la mayoría de los cirujanos establecen distinción sólo entre cuatro grandes grupos, los cuales corresponden realmente a cuatro síndromes clínicos principales:
- Celulitis necrotizante sinérgica o gangrena de Meleney
- Gangrena estreptocóccica
- Fascitis necrotizante
- Mionecrosis clostridiana o gangrena gaseosa
Algunos proponen separarlas sólo en dos grandes grupos:
- No clostridianas
- Clostridianas
Existe una tendencia hacia la agrupación de estos síndromes en una categoría única, la de las infecciones necrotizantes progresivas o fascitis necrotizantes,
término que en la actualidad presupone una infección bacteriana mixta, reconociendo un común denominador en cuanto a su etiología y factores predisponentes.
Ninguno de los signos clínicos, incluso la presencia de gas y crepitación en los tejidos, es patognomónico de los diferentes tipos de infección necrotizante de los tejidos blandos.
Entre los cuadros causales de este tipo de infecciones, podemos encontrar:
- Celulitis anaeróbica crepitante (infección mixta entre los que se encuentran gérmenes anaerobios del tipo de bacteroides, peptoestreptococo y enterobacterias. Generalmente se produce como complicación de lesiones post traumáticas)
- Fascitis necrotizante (cuadro producido por el Estreptococo piogenes; se caracteriza por la necrosis de la fascia superficial y a veces la profunda, acompañada de un cuadro tóxico generalizado)
- Gangrena de Fournier(infección a flora mixta de la zona perineal, producida por gérmenes del tipo de enterobacterias y Bacteroides F.)
- Mionecrosis no clostridiana (se presenta con frecuencia en la región perineal y en las extremidades inferiores, y sus agentes causales son enterobacterias, peptoestreptococo y bacteroides F.)
BENEFICIOS DE OHB EN INFECCIONES NECROTIZANTES
- Mejora la hipoxia tisular
- Favorece la capacidad fagocítica oxígeno-dependiente de los PMN.
- Abate acción sinérgica de infecciones mixtas.
- Acción bacteriostática sobre gérmenes anaerobios no esporulados.
- Detiene rápidamente la producción de alfa toxina
- Eleva el potencial de oxido-reducción celular.
- Permite utilizar una cirugía útil más conservadora.
- Evita amputaciones.
- La demarcación entre tejido viable y necrótico se produce claramente entre 24 a 30 horas con tratamiento con OHB (2 a 3 sesiones diarias)
- Incrementar la perfusión sanguínea en el área afectada, frenar la infección, mejorar las condiciones locales, lo cual permite que los antibióticos actúen.